¿Te imaginas abordar tu vehículo eléctrico y que este pueda desplazarse con la misma seguridad y confianza que un conductor humano experimentado? Eso es exactamente lo que Nissan está explorando con su nueva versión de ProPILOT, y el modelo elegido para liderar esta innovación es el Nissan Ariya, su SUV completamente eléctrico.
En las calles de Tokio ya circula un prototipo del Ariya que incorpora lo más avanzado en inteligencia artificial aplicada a la movilidad, y lo que ha revelado podría transformar radicalmente nuestra comprensión de la conducción en los próximos años. ¿Te gustaría conocer más sobre esta revolución tecnológica?

Nissan Ariya: el laboratorio móvil del futuro
El Nissan Ariya, reconocido como el primer SUV eléctrico a nivel global de la marca, se ha transformado en un verdadero laboratorio sobre ruedas. Nissan anunció en septiembre que este modelo está evaluando la nueva generación de ProPILOT, cuya presentación oficial en Japón está programada para el año fiscal 2027.
La selección del Ariya no es casual. Este SUV combina una notable autonomía eléctrica, un diseño innovador y sistemas digitales de última tecnología. Es, en resumen, el escenario ideal para probar tecnologías que requieren precisión, potencia computacional y máxima seguridad.
Durante las pruebas en las calles de Tokio, uno de los entornos urbanos más demandantes del mundo, el prototipo mostró su habilidad para desplazarse de manera segura, anticipando obstáculos y respondiendo a situaciones de tráfico caóticas que pondrían a prueba incluso a los conductores más experimentados.
Evolución de ProPILOT: desde sus inicios hasta la nueva generación
La historia de ProPILOT comenzó hace algunos años con un enfoque inicial: asistencia en carriles de autopistas. Esa versión inicial fue bien recibida por su capacidad para mantener el vehículo centrado y gestionar velocidad y distancias.
Posteriormente, se lanzó ProPILOT 2.0, que amplió sus funciones hacia una conducción más autónoma en carreteras de múltiples carriles, incluyendo maniobras de adelantamiento y cambios de carril asistidos. Este avance posicionó a Nissan como líder en la asistencia avanzada al conductor.
Ahora, la empresa apunta más alto: la conducción en entornos urbanos complejos. Aquí, los desafíos son considerablemente mayores: peatones imprevistos, ciclistas, semáforos, giros cerrados y un tráfico que cambia constantemente. El nuevo ProPILOT busca conquistar precisamente ese ámbito.

Colaboración de Nissan con Wayve: inteligencia artificial en acción
Uno de los pilares de este avance tecnológico radica en la alianza con Wayve, una startup británica que se especializa en inteligencia artificial aplicada a la conducción.
Wayve contribuye con su software “Wayve AI Driver”, un sistema capaz de aprender y adaptarse a diferentes escenarios de conducción mediante una IA avanzada. Este enfoque se diferencia de otros sistemas que dependen en gran medida de mapas preconfigurados, ya que aquí el vehículo aprende y reacciona en tiempo real.
Además, Nissan incorpora su propia tecnología denominada “Ground Truth Perception”, que se basa en un sistema LiDAR de última generación. Este sensor permite detectar objetos a mayores distancias y con más precisión que las cámaras tradicionales, ofreciendo al vehículo una visión más clara de su entorno.
La combinación de estas dos tecnologías promete una conducción que no solo reacciona, sino que también se anticipa a los eventos en la carretera.

Más allá de la seguridad: confianza y comodidad
El nuevo ProPILOT busca que los conductores vivan la experiencia de tener a un conductor humano experto al mando, pero con la ventaja de una precisión constante y sin el desgaste físico.
Según Eiichi Akashi, director de tecnología de Nissan, el objetivo va más allá de incrementar la seguridad. Se trata también de proporcionar confianza y tranquilidad al usuario en situaciones que, hasta ahora, eran dominio exclusivo de la conducción humana.
Imagina una intersección urbana saturada, con ciclistas cruzando, peatones distraídos y un semáforo que cambia en segundos. En esas circunstancias, el margen de error es mínimo. Aquí es donde el nuevo ProPILOT promete marcar la diferencia, no solo protegiendo al conductor, sino también a todos los usuarios de la vía.
¿Qué hace único al ProPILOT de Nissan en comparación con otros sistemas?
En un mercado donde cada vez más fabricantes lanzan sus soluciones de conducción autónoma, Nissan se distingue por una combinación excepcional:
- IA adaptable: gracias al software de Wayve, el sistema aprende del entorno en tiempo real.
- Sensores avanzados: el LiDAR de última generación amplía el rango de detección más allá de lo habitual.
- Visión integral: la fusión de estas tecnologías crea una “percepción de la verdad absoluta” del entorno, minimizando los puntos ciegos.
- Enfoque urbano: mientras otros sistemas se limitan a autopistas, ProPILOT se dirige hacia la complejidad de la ciudad.
Nissan Ariya y al futuro ProPILOT como líderes en la evolución hacia una movilidad autónoma en la vida cotidiana.

¿Cuándo veremos este sistema en nuestras calles?
El prototipo ya está en circulación en Tokio, pero el lanzamiento oficial del nuevo ProPILOT está proyectado para el año fiscal 2027 en Japón.
Es probable que, al igual que en versiones anteriores, la tecnología llegue primero a los mercados asiáticos antes de expandirse a Europa y América del Norte. Si Nissan cumple con los plazos establecidos, a mediados de esta década podríamos estar viendo sus primeros modelos con esta tecnología incorporada.
La visión de Nissan hacia una movilidad sostenible
La apuesta por el ProPILOT forma parte de la estrategia de Nissan hacia una movilidad más segura, inteligente y sostenible. La electrificación, simbolizada por el Ariya, se complementa ahora con tecnologías de asistencia y autonomía que buscan disminuir accidentes, optimizar la conducción y hacer más eficiente el tráfico en grandes ciudades.
Este enfoque no solo transforma la experiencia del conductor, sino también el entorno urbano. Menos errores humanos implican menos accidentes, un flujo de tráfico más eficiente y, en última instancia, ciudades más seguras y agradables para vivir.



