El Gran Premio de Australia 2025 de Fórmula 1 fue un espectáculo impresionante, lleno de sorpresas, drama y un despliegue de habilidades excepcionales. Lando Norris se alzó con la victoria en una carrera marcada por lluvias intensas y múltiples incidentes, demostrando un control total con su McLaren en un inicio de temporada que quedará grabado en la memoria de todos.
Pero, ¿qué hizo que esta carrera fuera tan inolvidable? Vamos a desmenuzarlo.
El control de McLaren y la desgracia de Piastri
Desde el inicio de la carrera, McLaren demostró su dominio con un ritmo impresionante. Lando Norris y su compañero Oscar Piastri lograron crear una ventaja notable de más de 15 segundos sobre Max Verstappen (Red Bull), dejando claro que el equipo británico estaba listo para dar pelea esta temporada.
No obstante, la fortuna no acompañó a ambos pilotos por igual. Piastri, compitiendo en su hogar y con la oportunidad de alcanzar un podio memorable, sufrió un trompo en las últimas vueltas bajo la feroz lluvia. A pesar de regresar a la pista, perdió una vuelta completa, lo que desvaneció cualquier posibilidad de subir al podio.
El accidente de Alonso y el cambio de dinámica
Todo parecía bajo control para McLaren hasta que Fernando Alonso, de Aston Martin, chocó en la curva 6, lo que llevó a la activación del coche de seguridad durante un largo período. Este incidente alteró completamente la dinámica de la carrera.
Al reanudarse la prueba, quedaban 16 vueltas por delante y la lluvia comenzaba a acercarse nuevamente. Era solo cuestión de tiempo antes de que el caos se apoderara del circuito.
La lluvia y la genialidad de Norris
La lluvia llegó de manera repentina, causando estragos en el asfalto. Norris y Piastri perdieron brevemente el control de sus monoplazas en la curva 12, aunque Norris pudo recuperarse rápidamente, mientras que Piastri se quedó varado, perdiendo segundos cruciales.
En ese momento, Norris demostró su temple. Tomó la decisión acertada de entrar a boxes para cambiar a neumáticos intermedios. En contraste, Verstappen optó por arriesgarse y permanecer en pista con neumáticos slick, lo que le permitió tomar momentáneamente el liderato.
Sin embargo, la estrategia de Red Bull fracasó. A medida que la lluvia se intensificó, Verstappen tuvo que entrar a boxes poco después, brindando a Norris la oportunidad de recuperar la delantera. La habilidad del piloto británico para manejar las difíciles condiciones fue clave para su victoria.
Choques, coche de seguridad y un final legendario
No podría ser una carrera memorable sin más drama. Los accidentes de Liam Lawson (Red Bull) y Gabriel Bortoleto (Sauber) llevaron a otro coche de seguridad, preparando el terreno para un emocionante sprint final de seis vueltas.
En esas últimas vueltas, Norris enfrentó la presión máxima de Verstappen, quien no se dio por vencido hasta el final. Sin embargo, la calma y la precisión del piloto de McLaren prevalecieron, asegurando así su primera victoria de la temporada 2025.
